¡Las fábricas de ladrillo en Jaén están paradas! me dijo un economista amigo hace unos días. ¿Y qué podemos hacer? Exportar. Es una forma de jerarquizar el producto que ha sido la estrella económica de los últimos años españoles. La Europa del este puede ser ese mercado-meta. El polvo de ladrillo puede ser la estrategia. ¿ O acaso el tenis español y su «armada» no están llenas de comunicadores? Posicionando el ladrillo sobre el qué triunfan los mejores. » No digas que no te lo advertainment»
Hasta la próxima – López Conde & Asociados-
Escribe tu comentario aquí. Creatividad, la mejor forma de enfrentar una crisis
Es momento de tomar nuevas iniciativas, eso está claro y no podemos pretender que las cosas se resuelvan solas, toca reinventarse pero aprovechando la base de la que partimos, al final lo que propones no deja de ser una diversificación de producto y una adaptación a nuevas condiciones del mercado (la imaginación al poder, si señor).
Desde luego que eso es echarle imaginación, si señor.