Finalmente con el desembolso de 4.500 millones de euros, como parte del pago de la primera cuota, la empresa Telefónica ha confirmado su adquisición del 50 por ciento de las acciones de Brasilcel, la sociedad de origen holandés que es dueña de acciones representativas de al rededor del 60 por ciento del capital de la sociedad brasileña Vivo, propiedad de Portugal Telecom S.A.
Para abonar el resto del dinero que le falta para completar con el total de la operación valuada en los 7.500 millones de euros, se dividirá en tres pagos mas. El primero de 1.000 millones de euros se realizará en Diciembre de este año, mientras que los 2.000 millones faltantes se abonarán recién en el mes de octubre del año que viene, a menos que Telecom S.A. pida el adelantamiento de esta fecha hasta el 29 de julio del 2011, lo cual puede hacer, pero descontándole unos 25 millones a la compra venta.
Como consecuencia de esta operación, el grupo que preside Céar Alierta ha pasado a tener el control de Vivo, luego de que el pasado 24 de septiembre, Anatel (Agencia Nacional de Telecomunicaciones de Brasil) autorizara esta compra de Telefónica. Esta aprobación, sin embargo vino sujeta a varias condiciones que tenían que ver con la universalización de servicios de la operadora, las cuales igualmente ya estaban previstas por la compañía Telefónica.
Además en coincidencia con el cierre de esta compra, han quedado resueltos los contratos suscriptos en el 2002 entre Telefónica y Portugal Telecom en base a su “Joint Venture” en Brasil. De esta manera Telefónica lanzará una oferta pública de adquisición de acciones (OPA), por las acciones ordinarias con derecho a voto de Vivo, por un valor equivalente al 80 por ciento del precio pagado por la compañía a Portugal Telecom.
